La conocida marca de ropa
interior fue creada por un tímido hombre de negocios en 1977
Con casi
20 millones de seguidores en Facebook y 1.260.000 en Twitter,«Victoria’s
Secret» es una de las marcas más famosa del mundo. Sin embargo, no
todo el mundo conoce la verdadera historia que se esconde tras la conocida
empresa de lencería femenina.
Contrariamente
a lo que podríamos pensar, esta compañía no fue fundada por ninguna empresaria
llamada Victoria, sino que, tal y como podemos leer en el blog
«Puro Marketing», fue creada en 1977 por un tímido
hombre de negocios llamado Roy Raymond.
Raymond,
que había estudiado en la escuela de negocios de Stanford, al igual que otros
muchos hombres, lo pasaba muy mal cada vez que debía comprar lencería
para su esposa. Por ello, decidió inventar un nuevo concepto que
resultara más cómodo para los hombres.
Así, con
una inversión de solo 80.000 dólares, abrió su primera tienda en la
ciudad de San Francisco. En lugar del agobio que ofrecían los grandes almacenes
con una gran cantidad de tallas, modelos y dependientas, Raymond mostraba
conjuntos únicos y exclusivos expuestos en unos marcos en las paredes entre los
que se podía curiosear sin incomodidades de ningún tipo.
Una vez
que el cliente había elegido un conjunto, un asesor de la tienda le ayudaba a
decidir la talla. Además, complementó estos servicios con un catálogo
de venta por correo.
Tan solo
cinco años después de su fundación, «Victoria’s Secret» contaba con seis
almacenes, disponía de un catálogo de 42 páginas e ingresaba alrededor de seis
millones de dólares al año. En ese momento, Raymond decidió vender la
compañía a la firma «The Limited»por tan solo cuatro millones de dólares.
Los
nuevos dueños decidieron expandir la compañía a lo largo de Estados Unidos y
comenzaron a producir perfumes, zapatos y otro tipo de prendas
bajo la marca «Victoria’s Secret». En menos de una década, la empresa se
convirtió un referente mundial e ingresaba más de mil millones de dólares
anuales.
A pesar de haber revolucionado la forma de
comercializar la lencería femenina, era evidente que Roy Raymond había hecho un
negocio ruinoso con la venta de su empresa. En 1993, agobiado por las deudas,
el creador de «Victoria’s Secret» se suicidó saltando a la
bahía de San Francisco desde el Golden Gate.
dE: abc.es
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