Acá algunas leyendas urbanas que resultaron reales.
1. La niña del closet. Cuántas veces nos ha sucedido que ya estando descansando en el cuarto, siente esa sensación de que alguien le está espiando desde el armario. Algo similar le sucedió a un hombre en Japón, al que misteriosamente se le desaparecían objetos de su casa y quien despertaba por las madrugadas debido a ruidos, pero que al inspeccionar su hogar, no encontraba nada.
Desesperado, se le ocurrió armar un circuito de videovigilancia casero, el cual accionó una noche; al día siguiente, se llevó la sorpresa de su vida al ver cómo alguien salía de su closet, que se le acercaba para percatarse de que él en realidad estuviera durmiendo y no se trataba precisamente de un fantasma.
El japonés acudió de inmediato con la policía, pues podría tratarse de algún asaltante. De inmediato, emprendieron la búsqueda y localizaron a esa persona. Se trataba de una mujer indigente, que por más de un año vivió a escondidas en el armario y, que cuando se iba el dueño de la casa, comía y se bañaba en el lugar.
2. El collar explosivo. En varias cintas de terror hemos visto cómo el asesino puede obligar a sus víctimas a realizar cosas impensables. En la cinta Saw 3, el malo le pide a un hombre que se coloque en el cuello un collar repleto de artefactos explosivos.
Seguramente el guionista cuando escribió esta escena se inspiró en un suceso acontecido en 2003, en Pensilvania. Brian Wells era un repartidor de pizzas, que aquel 28 de agosto se dirigía, supuestamente, a entregar un pedido. Después de varias horas desaparecido, Wells se encontraba en un banco, armado con una escopeta y al cuello llevaba un collar explosivo.
La policía arribó rápidamente al lugar; Brian aseguraba que alguien más le había obligado a cometer el delito y que por favor le ayudaran a desactivar el collar; los agentes no le creyeron y minutos después, fueron testigos de cómo el hombre se desintegraba por una explosión. A los pocos días, se detuvieron a varios hombres, mismos que confesaron haber obligado al joven a ser cómplice en el robo, por lo que la sociedad criticó duramente el actuar de sus vigilantes.
3. La llamada asesina. Clásica escena de película de terror en donde en medio de una fuerte tormenta, alguien recibe una llamada telefónica misteriosa y acto seguido, se ve el cuerpo de la víctima.
En 1985, la prensa divulgó un acto similar a éste. Se trataba de un joven de 17 años de edad, llamado Jason Findley, quien fue encontrado muerto sobre su cama con un teléfono en la mano.
Al principio, se especuló que el adolescente fue asesinado; sin embargo, la teoría se descartó al no encontrar ningún golpe o herida en su cuerpo. Médicos forenses concluyeron que Findley falleció a causa de una descarga eléctrica que cayó sobre el cableado telefónico, misma que recorrió toda la línea hasta llegar al auricular, lo que paralizó su corazón. Entre1984 y 1986, en Estados Unidos, cerca de un centenar de personas murieron también por dicha causa.
4. Elevadores que decapitan. Cuando utilizamos el ascensor, nos apresuramos a subirnos, pues alguien por ahí nos ha contado que otra persona vivió una desgracia al momento de cerrar las puertas. A nadie le gustaría que éstas nos aprisionaran, de por sí ya se siente angustia cuando pasan con nuestros abrigos, bolsas y mochilas.
Un gravísimo accidente en el elevador, es el que le ocurrió a Hitoshi Nikaidoh, en un hospital de Houston, Texas. El doctor iba entrando al ascensor, cuando de repente las puertas se cerraron, su cabeza quedó atrapada. Una mujer que estaba ahí, presionó varias veces el botón para abrirlas, pero no funcionó, por lo que el aparato se elevó y Nikaidoh murió decapitado.
5. Pájaros vengativos. Lo plasmado por Alfred Hitchcock en la película “Los Pájaros”, a más de uno les causó pesadillas, cierta aversión y temor a dichos animales. La ciencia ha descubierto que, en particular, los cuervos pueden identificar rostros humanos e incluso, saber cuándo alguien está atemorizado.
Pero, ¿sentiría temor por los gallos? Parecieran ser inofensivos, aunque un hombre llamado José Luis Ochoa, no debe pensar lo mismo. Él se dedicaba a la crianza de gallos de pelea y a la organización de dichos eventos. En más de una ocasión fue reprendido por las autoridades, cosa que poco le importó y siguió con su negocio.
En alguna de esas peleas, probablemente uno de sus enemigos, cambió las navajas por cuchillos en uno de sus gallos, el cual saltó sobre José Luis hiriéndolo en una arteria que cruza la pierna, ocasionándole la muerte.
6. Esqueletos encontrados en construcciones antiguas. Un grupo de hombres se encuentran trabajando en la remodelación de un edificio cuando, de repente, al derrumbar una pared se topan con un esqueleto, el cual corresponde a una persona que desapareció hace muchos años.
¿Cómo es que pudo llegar ahí?, sería la pregunta que cualquiera pudiera hacerse. Pues bien, esta es la historia de José Schexnider, cuyos restos fueron hallados en el Banco Nacional de Abeville. Obreros trabajaban en la remodelación del segundo piso cuando descubrieron una placa metálica en una de las paredes; la quitaron y encontraron un tiro de chimenea en cuyo fondo, se encontraban los huesos de este hombre. Hasta ahora, se desconoce cómo es que llegaron hasta ahí o cómo quedó atrapado.
7. Enterrado vivo. Una de las situaciones límite que jamás nos gustaría experimentar, es ser enterrado por error; lo malo es que nadie puede garantizarlo, pues esto ha pasado ya en varias ocasiones.
A Liang Jinshi le sucedió. El hombre de 40 años es diabético y fue declarado muerto. Un domingo, su cuerpo fue enterrado y su esposa, tras la fatídica pérdida, acudió tres horas después a la tumba de su marido. Sorpresa la que se llevó la mujer cuando de repente escuchó que Liang pedía auxilio. El hombre fue rescatado y los médicos no descartaron un posible caso de catalepsia.
8. Vampiros en busca de humanos. Los vampiros que se muestran en la saga de “Crepúsculo” podrían estar basados en historias reales. Esos seres que observan a los humanos desde lo más alto del bosque, son muy semejante a hechos ocurridos en Perú.
Las autoridades arrestaron a una banda de asesinos que operaban en la parte más alta de una selva de dicha región; cuando fueron capturados, encontraron restos de personas y varias botellas de plástico llenas, de lo que al parecer era, grasa humana.
Los hombres confesaron que capturaban a cualquiera que pasara por los caminos que se encuentran en el lugar, para posteriormente matarlos y extraerles el cebo del cuerpo, misma que era vendida a fabricantes de cosméticos que operan en el mercado negro.
9. Llamada desde el más allá. También suena como a película o historia de terror que alguien reciba una llamada telefónica de alguien fallecido.
Esto es lo que le sucedió a la familia de Charles Peck, quien viajaba en un tren de California que se impactó con otro de carga, falleciendo unas 25 personas al instante. La familia de Peck, sabiendo que él viajaba en el tren, no se separó de la televisión y vio el resultado de la catástrofe; de repente, recibieron llamadas desde el celular de Charles, aproximadamente 35 minutos después del choque. Nadie pudo explicarse cómo es que sucedió, pues Peck era uno de esos 25 fallecidos.
Tomado de: De10.mx
¿Podría contarnos una leyenda urbana?
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